Presentación y Primera historia

Saludos, soy Alvaro Casalino, y agradezco a Agustín por permitirme participar en este blog.
A continuación, colocaré el primer capítulo escrito para este blog:


Josh caminaba incómodo por la calle frìa y vacía.¿Por qué incomódo?Por todo: sus problemas en casa, por sus problemas en la escuela, por sus problemas consigo mismo, bien fuera su habilidad para sociabilizar con los otros, hasta su aspecto físico.(flaco, bajito, y con unas enormes gafotas, el odiaba su imagen reflejada espejo)
Esta tarde llevaba una enorme bufanda que le tapaba la boca (Josh lo agradecía, pues usaba unos enormes frenos que le hacían blanco de burlas.)Se aburría: En unas horas tendría que volver a casa, a escuchar las quejas y lamentos de su madre, luego de discutir con su irascible padre, y mañana tendría que ir al colegio, a aquellas interminables clases en donde estaría con gente que le odiaba, y que parecían prolongarse por siglos.
Josh llegó por fin al puente: Este día el río estaba particularmente embravecido por obra del viento invernal.Josh observó fascinado como las aguas oscuras y turbulentas golpeaban con fuerza las bases de roca del puente, como tratando de derribarlo inútilmente.Por unos instantes, dejó de pensar en su miseria, y pensó en la miseria de las aguas negras, inútilmente tratando de derribar al puente desde hace siglos.Y se imaginó a seres anfibios, similares a los hombres, pero cubiertos de escamas, como los peces, con enormes ojos acuosos, sin parpádos, maldiciendo en su extraño idioma al puente que interrumpía el curso de las aguas del río, y venerando a dioses tallados en piedra o en madera con formas de peces y ballenas."Pero eso es imposible, claro." pensó Josh, dejando hablar a su lado más realista.No obstante, algo extraño brillaba sobre las turbulentas aguas.
Al principio creyó que se trataba de algún objeto metálico que había caído al río, pero Josh sintió que aquello era un ser vivo, que le observaba desde la oscuridad de las aguas.Josh se acercó un poco más. Si, definitivamente, no era un objeto,sino algo vivo, que nadaba contra la corriente, pero aún así, Josh no era capaz de ver con claridad de que se trataba.-¿Un pez?-Se preguntó Josh.Josh está apoyando la mitad del cuerpo sobre los barandales del puente de piedra: Acercarse más sería peligroso. Pero aquel ser fosforescente seguía observándolo. Incluso creyó que le llamaba, por encima de las olas.¿Debería Josh acercarse más, poniendo en riesgo su vida, tan sólo para satisfacer su curiosidad?


A partir de este punto, los lectores de este blog pueden contribuir a continuar esta historia, y también pueden incluir imágenes y/o videos para reforzar su colaboración.
Su colaboración puede ser enviada al siguiente correo: ach8826@yahoo.com